
Rest Day | Todos los atletas descansan…
Konjo
Esta fotografía la tome en Cañas, Guanacaste, durante la filmación de un documental, hace ya una cantidad de años. Mi equipo era poco, las horas eran largas, no teníamos remuneración económica, comíamos 1 vez al día, arroz chino y si teníamos una cama para dormir al final del día era algo masivo.
La monta rústica guanacasteca y la tauromaquia en general es algo que ha sido dominado por hombres, normalmente. Por lo cual, estando en la manga, debajo del tablado, escuchando a los toros frustrados esperando salir, los payasos las cimarronas, y los de la televisión — fue algo impresionante verla a ella salir.
Caminó dominando la arena. Elegante, sin una sola gota de inseguridad en ella. Determinada y lista, con su indumentaria y una mirada que nunca desearía sea a mi a quien sea dirigida.
Los comentarios que se escucharon previo a sus acciones eran diametralmente distintos a los que se dieron una vez que ella había terminado. Con su mirada orgullosa y un poco despeinada, se fue para su casa con un redondel entero de alabanzas y aplausos, los cuales probablemente tiene guardados en un lugar de su mente para momentos especiales nada más.
Esto es lo que pasa con la gente que tiene determinación por sus metas. Lo hacen por ellos, no esperan nada de nadie, no escuchan lo que los demás piensen, opinan o digan. No les importan las circunstancias, estadísticas o probabilidades. No es algo que escogieron, es algo que un día se despertaron y lo tenían adentro de su ser.
Konjo es un termino japonés que significa “orgullo varonil”, o que se traduce al inglés a “guts”, “willpower”, “temper” o “manly pride”. Por alguna razón al leer en un libro sobre este término, esta era la imagen y el momento de mi vida que se me vino a la mente.
Repasé toda la escena y no creo que haya una idea más clara de Konjo en mi vida. Y si tuviera honestamente que hablar de las personas que más lo representan en mi vida, quizá la gran mayoría, serían mujeres también.
Ojala usted que lee esto, y consume de esta imagen, pueda entenderlo, y hacerlo parte de su vida. De su forma de ser, de su modus operandi. Konjo es menos sobre el hombre y más sobre el orgullo. Es una especie que se le pone a la comida, no es la comida.
Es la manera en que se opera para llegar a la meta, no es la meta. Es el estar en una arena, rodeado de detractores y estar seguro de que, de base, sus chances son iguales a las de cualquiera, sin embargo a sabiendas de que usted ha hecho la tarea y es todo lo que importa. Usted, su trabajo, hecho a su manera, y que los demás desaparezcan aplaudiéndole su labor, en un lugar de su mente en donde está todo lo que es anecdótico, pero que cada cierto tiempo es gracioso visitar.